El ministro de Defensa, José Antonio Alonso, ha afirmado este lunes que "no sería bueno" para España que Kosovo proclamara unilateralmente su independencia, y cree que a "ningún país" de la UE "le gustaría", ya que esta decisión podría provocar "inestabilidad" en "el corazón de Europa".
En una entrevista en Los desayunos de TVE, Alonso ha señalado que, en cualquier caso, la postura del Gobierno español es "clara": "mantener la unidad de discurso y de acción con la Unión Europea" y desarrollar "una política de alto nivel" en la región.
En su opinión, el futuro de Kosovo "está en Europa", pero ha añadido que, para ello, "hay que tener sistemas políticos y sociales estables", por lo que "es esencial" que se respeten los derechos humanos de las minorías que conviven en la región.
El ministro ha negado que exista una relación entre el caso serbio y el español, ya que España es un estado consolidado, y ha manifestado que, "por el momento", los soldados españoles "se quedan ahí para garantizar la paz y la seguridad" de las minorías.
La UE busca una respuesta común
Los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea intentan buscar una respuesta común en Bruselas ante la probable independencia de Kosovo, y debaten la posibilidad de hacerse cargo de la seguridad y la justicia en esta provincia serbia de mayoría albanesa.
Los albano-kosovares han anunciado que podrían declarar su independencia en cualquier momento.
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